Se encontró en el máximo organismo de la seguridad y salud en trabajo, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) define el trabajo, como el conjunto de actividades humanas, remuneradas o no, que producen bienes o servicios en una economía, o que satisfacen las necesidades de una comunidad o proveen los medios de sustento necesarios para los individuos. La intervención ergonómica de carácter participativo se ha venido promoviendo en las últimas dos décadas, aunque la definición es tan general, que se queda corta a las necesidades de cada actividad laboral, según el sector económico y sus características (5).