Durante años la industria del transporte ha implementado en sus vehículos materiales como la fibra de vidrio, fibra de carbono y plástico para algunas de sus piezas, pero el problema con el uso de estos materiales es que para su producción se emplean procesos químicos y físicos que dañan el ambiente y pueden ser nocivos para la salud de sus productores. Además, al finalizar su vida útil estas piezas no suelen ser recicladas, ya sea porque para hacerlo los procesos son costosos y complejos, o porque no es posible. De esta manera, este proyecto busca investigar y producir un material compuesto por fibra vegetal y una baja porción de polímero, que se pueda usar para este sector y que permita reducir los daños en la salud y los daños ambientales.