El presente escrito, pretende abordar la participación democrática de las comunidades indígenas y los residentes en el exterior entendidos como minorías políticas, que encuentran un mecanismo de participación democrática prescrito en la carta política y desarrollada en la ley 649 de 2001. La cantidad de curules en la Cámara Baja del Congreso Colombiano, responde al crecimiento poblacional, es decir, que el aumento de la población permite la creación de más curules que representan a la población creciente, sin embargo, para las circunscripciones especiales señaladas anteriormente, se mantiene la representación por ministerio de la Ley, surgiendo la incógnita de si ¿el crecimiento demográfico como regla de participación democrática debe aplicar para las circunscripciones especiales?