La naturaleza jurídica flexible de los Tratados de Libre Comercio – TLC – le ha permitido a los Estados negociantes incluir temáticas de interés no sólo del ámbito comercial, sino también ambiental, laboral y social, entre otros. Por otro lado, recientemente se ha incluido el enfoque de género en distintas áreas, el cual busca determinar el impacto diferencial que ciertas situaciones tienen sobre los hombres y las mujeres por separado, y a partir del cual se ha concluido que es necesario propiciar la inclusión de las mujeres en la economía para generar mejores condiciones de vida. Este artículo propone, entonces, aprovechar la flexibilidad de los TLC para implementar en Colombia nuevas políticas comerciales basadas en el enfoque de género que permitan una mejor redistribución de los recursos y, en consecuencia, disminuyan la desigualdad económica.