Tocando temas como la circularidad y espiralidad de los ciclos, los ciclos que se desgastan, la intuición y corporalidad animal en el cuerpo humano, y la huella que el cuerpo deja en su espacio, Kïklos consiste en un acto performático conformado por una serie de acciones de encuentro, lucha y colapso que duran seis minutos antes de volverse a repetir cinco veces en un lapso de treinta minutos. Kïklos es una lucha y una crisis que se renueva constantemente, pasando por las mismas situaciones con ligeras variaciones, pero inevitablemente llegando al mismo final del colapso; es un cuerpo rojo, invertido de adentro hacia afuera, con sus pasiones expuestas, que se esfuerza por alcanzar una estabilidad imposible.