Este trabajo de grado cuestiona el concepto de aprendizaje y sitúa dos conceptos en el contexto de la educación inicial: el estudio y la enseñanza. Se plantea un marco teórico robusto para comprender la enseñanza desde otra perspectiva y a través de una metodología cualitativa, se postulan las características que debe tener una enseñanza para generar una actitud de estudio en los niños y niñas de grado transición. Tanto los maestros, como los estudiantes y las instituciones pueden tomar esta investigación para plantearse la formación desde la enseñanza y el estudio, dos conceptos que otorgan sentido al acto formativo y a la escuela como lugar de formación desde edades tempranas. Esta investigación invita a volver a pensarse el triángulo didáctico, la relación entre maestro, estudiante y objeto de estudio; invita a volver a preguntarnos cuestiones pedagógicas como el qué, el cómo y el para qué de la formación. Pero más que nada, esta investigación anhela que la educación vuelva a estudiarse y a definirse a sí misma y deje de ser esclava de disciplinas ajenas que buscan definirla y minimizarla; por lo tanto, busca que el rol del maestro se reivindique y deje de ser visto como prescindible.