La enfermedad cardiovascular es la principal causa de morbimortalidad y discapacidad en el mundo. Por ello es importante conocer los factores de riesgo que permitan detectar personas asintomáticas que tienen una mayor probabilidad de enfermarse en el futuro en comparación a la población general. El 20% de las personas que experimentan eventos cardiovasculares no presentan los factores de riesgo tradicionales. En este grupo de individuos se necesita investigar otros factores y emplear una estrategia de reducción de riesgo más agresiva.