Los tumores de cabeza y cuello (CC) representan la quinta neoplasia más frecuente y en un porcentaje muy elevado corresponden a carcinomas de células escamosas, muchos de estos en estadios avanzados. El estado de los ganglios linfáticos regionales es uno de los factores pronósticos más importantes; el manejo del cuello negativo ha sido muy controversial y a través de la historia, en el esfuerzo por disminuir la morbilidad de la clásica disección radical, han sido propuestas varias modificaciones yendo hacia vaciamientos