En Colombia, nos encontramos en la ejecución de la Estrategia Nacional BIM 2020-2026 la cual tiene como objetivo la implementación de dicha la metodología en los estamentos públicos del país, y con ello impulsar la modernización en el sector de la construcción, así mismo, se destacan otras iniciativas como el BIM Fórum Colombia, impulsado por CAMACOL, y el cada vez más creciente número de empresas que han encontrado en el BIM, las herramientas que necesitaban para dar una solución técnica a sus proyectos. Sin embargo, y a pesar de estar adoptando con entusiasmo los principios fundamentales de la metodología, ya en la práctica, ésta, en la mayoría de los casos, solo logra adaptarse parcialmente a los procesos de diseño y coordinación, y en pocas ocasiones llega a tener algún impacto real en la construcción, en donde, después de haber desarrollado modelos tridimensionales capaces de simular la realidad, cuantificar, detectar errores y monitorear procesos, estos son traducidos a lenguajes tradicionales de planimetrías bidimensionales donde pierden la mayoría de sus capacidades reales. A consecuencia de ello, se presenta una desconexión entre el modelo BIM y la obra civil, todo ello agravado por la brecha que sostienen en temas de tecnología los procesos de diseño y obra, lo que deriva en que tenemos herramientas para generar información, pero no para interpretarla o traducirla en términos que la obra pueda entender y ejecutar, desaprovechando el máximo de las posibilidades que un modelo tridimensional, cargado con toneladas de información es capaz de ofrecer. Este problema, ha desembocado a su vez en el desuso de los modelos, la implementación parcial de las herramientas, la desatención a las prácticas de calidad, y en muchas ocasiones el desistimiento total en la implementación de la metodología. La propuesta que se ha presentado a lo largo de esta investigación, plantea reducir la brecha entre el modelo digital y el elemento real que se concibe en la obra, al generar un monitoreo constante por medio de herramientas tecnológicas, ya existentes en el mercado, y que nos permiten escanear en tiempo real el avance de la construcción. Para ello se ha tomado un caso de estudio y se ha desarrollado un ejercicio que permite evaluar la factibilidad de desarrollar un Gemelo Digital, que tome e interprete lecturas en tiempo real de una estructura en concreto en pleno desarrollo, mediante una nube de puntos que se conecta directamente al modelo BIM, advirtiendo de diferencias y recolectando data que permita evaluar situaciones particulares y facilite el proceso de toma de decisiones. (Texto tomado de la fuente)