En Colombia las víctimas de desplazamiento forzado a causa del conflicto armado llegan en el año 2018 a la cifra de 7´379.975 personas registradas. Como consecuencia de esto las condiciones de vida de este grupo poblacional han sido fuertemente afectadas, generando mayores situaciones de vulnerabilidad, pobreza, segregación, entre otros. A raíz de esta situación el gobierno a partir del año 2011 ha propuesto una serie de medidas de reparación integral a las necesidades básicas manifiestas de la población desplazada; estas medidas comprenden, entre otras, el acceso a vivienda propia y digna, como punta de lanza de la misma propuesta, sin embargo dicha medida ha dejado mucho que desear, debido no solo a que cuantitativamente ha sido insuficiente, sino que además al hacer entrega de estas unidades habitacionales se desconocen completamente las tradiciones económicas, culturales, vivenciales y de contexto en general, que conllevan con el tiempo a un deterioro mayor de su proyecto de vida. Se debe tener en cuenta que la capacidad institucional es limitada y que el desconocimiento de las necesidades particulares podría agudizar esta problemática en el contexto colombiano y en particular para este caso de estudio en las provincias de Cundinamarca, por lo que se propone reestructurar las medidas para convertirlas en soluciones definitivas, que devuelvan la identidad de los beneficiarios, haciéndolos parte del territorio y construyendo verdaderos escenarios de paz. (Texto tomado de la fuente).