La teoría del gasto público local se concibe formalmente desde la Hipótesis de Tiebout en 1956. La consideración de un mecanismo para la revelación de las preferencias por bienes públicos introdujo un argumento a favor de la descentralización fiscal. Se argumenta que los gobiernos locales juegan un papel crucial para lograr condiciones eficientes en la provisión del bien público local a través de la determinación de un sistema fiscal adecuado. Este trabajo parte de la hipótesis de Tiebout para examinar sistemáticamente el desarrollo histórico de la teoría y las condiciones bajo las cuales sigue siendo válida analíticamente. Como aporte complementario, se propone un modelo de gasto público local, que analiza íntegramente, los condicionantes de un gobierno descentralizado.