Del año 2007 al 2013, el laboratorio nómada medial No2somos+ desarrolló una serie de proyectos y acciones encaminadas a generar espacios de educación hacker que involucrarón a diversas comunidades campesinas y urbanas, fomentando procesos autónomos relacionados con la creación audiovisual; el cacharreo tecnológico y la activación de redes colaborativas desde el diálogo transdisciplinar teniendo en cuenta los saberes presentes en los espacios donde se realizaron estas inmersiones. El objetivo principal en estos procesos de aprendizaje, era consolidar espacios autogestionados y autónomos; a través de constantes ejercicios reflexivos en torno al aprender por sí mismos, y como los resultados de estas búsquedas de interés personal, se circulan en las redes de aprendizaje cercanas, para seguir construyendo de manera colectiva, generando más preguntas que posibles respuestas. Sin embargo, uno de los mayores retos fue deconstruir los modos paternalistas o asistencialistas instalados en los territorios, heredados de la política tradicional, para darles la vuelta a estas prácticas instauradas y devolver la confianza comunitaria. Tal situación, generó constantes tensiones y otras maneras de compromiso frente a los bienes comunes, la cultura libre y el accionar colectivo. La presente investigación analiza y reflexiona sobre dicha experiencia para explorar ¿cómo se construyen aprendizajes significativos desde modelos educativos libres, horizontales y colectivos? y ¿cuáles fueron los aprendizajes significativos desde la educación hacker que se generaron en las personas que estuvieron involucradas en este intercambio de saberes? Considero importante las autorreflexiones generadas en este texto en el campo de la comunicación, porque se centra en la importancia de los relatos orales como dinamizadores de los procesos educativos comunitarios; fortaleciendo los encuentros y desencuentros desde los afectos, emociones y prácticas, colocando como bien común el capital cultural, artístico y social presente en los territorios. Para armar este rompecabezas comunitario, empiezo por generar constantes diálogos con los participantes de No2somos+ que se acercaron a este proceso investigativo, además, de la revisión y análisis de algunas de las memorias audiovisuales que compilan los procesos educativos hackers desarrollados en las comunidades donde se realizaron los laboratorios. Entendidos como lugares donde se generan relatos, autorepresentaciones, críticas y contenidos, que obedecen a las necesidades propias de los territorios, donde el valor del aprendizaje autodidacta está presente en cada acción creativa. Por consiguiente, este trabajo no se centra en los productos comunicativos, sino en las maneras en cómo las personas involucradas en estos intercambios siguen generando prácticas desde la educación hacker, importantes para construcción social del conocimiento. De ahí, que este texto parte de la intención autorreflexiva, colocando en debate diversos temas relacionados con la comunicación, la pedagogía experiencial, el activismo social, la educación hacker, el cacharreo tecnológico y las prácticas artísticas contemporáneas; haciendo uso de la intuición, el afecto y el aprender de manera autónoma. Estas acciones se activaron en su mayoría en los municipios de Sutatenza, Tenza, Guateque, Garagoa del departamento de Boyacá y en las ciudades capitales de Medellín y Bogotá. En el primer capítulo, me acerco al pensamiento comunitario, ¿de dónde surge esta inquietud y cómo se va complejizando en mi práctica desde la educación hacker en los procesos desarrollados por el laboratorio nómada medial No2somos+; en el segundo capítulo, reflexiono sobre el activismo social, pensado como un lugar de encuentros y desencuentros, de tensiones constantes, decepciones y utopías; en el tercer capítulo, me centro en los debates surgidos alrededor de la educación hacker, cultura libre y activismo social presente en el trabajo comunitario; para el cuarto capítulo, abordo la importancia de los medios alternativos de comunicación en los territorios campesinos, indígenas y barriales, los cuales se están reinventando todo el tiempo, generando relatos que movilizan las comunidades desde las diversas dimensiones del ser humano; en el quinto capítulo, colocó sobre la mesa de discusión a la cultura hacker y el cacharreo tecnológico, basado en la experiencia y los diálogos que No2somos+ construyó durante estos años, con diversos modos para acercarse a las comunidades, promoviendo la autogestión, la autonomía y el diálogo transdisciplinar.