El presente documento constituye un proyecto de diseño urbano cuyo enfoque es “El desarrollo orientado al transporte sostenible” (DOTS), teniendo como área de trabajo la ciudad de Bogotá, y como temática la problemática actual en torno al planteamiento, trazado y diseño de la primera línea del sistema de transporte masivo metro. Basados en las actuales teorías “DOTS”, que ponen de presente el gran potencial de transformación urbana, inherente a la implementación de sistemas de transporte público en ciudades de países emergentes, cuyas directrices de planeamiento los han ignorado; surge la necesidad de reflexionar en torno a las oportunidades paralelas a las colosales inversiones que implican. Es por esto, que esta exploración tiene punto de partida en la escala macro (urbano territorial), evaluando la propuesta metro, desarrollada por la administración distrital (2012–2015) con una mirada crítica frente al proyecto de ciudad y la movilidad sugerida en el mismo, con el objeto de determinar la pertinencia de un modelo de ciudad basado en la relación transporte - usos del suelo, aplicable a la condición actual de Bogotá, para luego abordar la escala intermedia, propia del diseño urbano, y demostrar allí, el rol fundamental de la estación de transporte en la transformación urbana de su entorno inmediato, en la búsqueda del concepto de vida urbana de proximidad, escala humana y riqueza sensorial del espacio público. Para ello fue seleccionada como área de intervención la Carrera 10 a la altura de las calles 10 y 12, donde el proyecto de primera línea de metro, plantea la incorporación de la estación san Victorino, responsable de articular un entorno inmerso en una problemática histórica (patrimonial), urbana, ambiental y social muy compleja, y donde adicional a ello se debe integrar el nuevo sistema (metro) al ya existente BRT Transmilenio, en la búsqueda de un concepto claro de inter modalidad. En consecuencia, y apoyados en la “Teoría urbana de catalizadores”, como estrategia clave en la intervención de centros de ciudad, donde a partir de un amplio “sentido del lugar” proveniente del exhaustivo estudio de factores contextuales, se establece un programa maestro de intervención que implica la inserción de elementos urbanos, que interactúen con el contexto, desencadenando reacciones catalíticas cuyo propósito es la revitalización gradual y continua del tejido urbano. (Texto tomado de la fuente).