La calidad del aire en el Valle de Aburrá está influenciada por fuentes de emisiones de material particulado que se dan al interior y al exterior del territorio. Este estudio analiza las fuentes externas de contaminación, como las quemas de vegetación regionales y aporta elementos que permiten entender la incidencia de las emisiones producidas sobre la calidad del aire de un territorio. Se empleo la teledetección mediante MODIS para hallar puntos de calor e identificar aerosoles generados por dichas quemas, mediante el uso del producto espesor óptico de aerosoles (AOD) con el algoritmo de corrección atmosférica multi-ángulo (MAIAC) y los valores de PM detectados mediante estaciones de monitoreo In situ. Igualmente se realizó un análisis de retrotrayectorias empleando el modelo HYSPLIT para verificar la procedencia de las masas de aire contaminadas que arribaron al Valle entre 2016-2020 y un análisis específico para el tiempo de aislamiento obligatorio generado por el COVID19 en 2020. Los resultados muestran que, entre febrero y abril del periodo de estudio, se presenta el mayor número de quemas en el nordeste Antioqueño y por ende las mayores concentraciones de AOD alcanzando valores por encima de 0.6, lo que denota áreas muy contaminadas y concentraciones de PM2.5 que oscilan entre 24 y 45 µg/m3 para PM2.5. De acuerdo con el estudio de las retrotrayectorias y el análisis de correlación el AOD, las quemas y el PM2.5 se encuentran estadísticamente relacionados y permite concluir que efectivamente las emisiones generadas por las quemas de vegetación inciden en la calidad del aire del Valle. (texto tomado de la fuente)