A partir de la reflexión sobre el edificio público, se estudian los Palacios de Justicia de Bogotá. Dentro del marco de la relación entre arquitectura e instituciones, se explora su función representativa y el significado que de ellos ha construido la sociedad; de acuerdo con el cometido simbólico que se les ha impuesto de erigirse como símbolos del poder estatal, se indaga en la intención de alcanzar un ideal de representación y, en contraste, cómo se lleva a cabo su realización acorde con el contexto específico en el que tienen lugar.