El fenómeno de la soberanía, según se desprende de la emisión del fallo sobre excepciones preliminares de la Corte Internacional de Justicia en el diferendo territorial y marítimo entre Nicaragua y Colombia, presenta varias implicaciones. De una parte, la atinente a su reafirmación respecto del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina y, de otra parte, el cuestionamiento en relación con las formaciones marítimas distintas de las islas mencionadas y de la definición de los límites marítimos entre las dos naciones. Para la cabal comprensión del contexto en que se aprecia la soberanía, es necesario acudir a la ciencia geográfica, como un recurso de indefectible utilización, en la medida en que realmente se pretenda efectuar un análisis serio y fundado sobre el ámbito de aplicación de la primera, el cual aquí he propuesto como un espacio geográfico y no simplemente como un territorio, al igual que sobre su ejercicio efectivo, no solo por parte de las autoridades competentes, sino en general por toda una ciudadanía que reivindique su derecho al disfrute de ese espacio geográfico.