Los ecosistemas de humedales son un eslabón fundamental dentro del ciclo hidrológico, debido a su estrecha relación con el agua permite la conectividad de un mosaico de coberturas favoreciendo de esta manera el desarrollo exitoso de una amplia diversidad de flora, fauna y microorganismos en complejas interacciones con otros sistemas, es por ello que estos cuerpos de agua desempeñan un papel fundamental desde una perspectiva ecológica y socioeconómica en el desarrollo de las comunidades. Colombia al ser un país reconocido por su alta potencialidad de recursos naturales e hídricos es incorporado en la convención RAMSAR el 18 de octubre de 1998 donde actualmente tiene designados 7 sitios como Humedales de Importancia Internacional (sitios RAMSAR), de acuerdo a esta adhesión y según el documento de Política Nacional de Humedales Interiores de Colombia, los humedales han sido reconocidos como “áreas de especial importancia ecológica”; así mismo, la legislación ha reconocido la importancia de estos ecosistemas. Mediante la Ley 99 de 1993 el Estado Colombiano establece la responsabilidad del Ministerio del Medio Ambiente en relación con los humedales y adopta esta responsabilidad por medio de la Resolución 157 del 12 de febrero de 2004, en su artículo 4, dispone en relación con el Plan de Manejo ambiental, que las Autoridades Ambientales competentes deberán elaborarlos y ejecutarlos para los humedales prioritarios de su jurisdicción, los cuales deberán partir de una delimitación, caracterización y zonificación para la definición de medidas de manejo, con la participación de los distintos interesados.