Los desplazamientos que realizan las personas en su vida cotidiana demandan recursos como: espacio urbano, modos de transporte, tiempo y dinero, entre otros. Atender las necesidades de desplazamiento de la población es uno de los temas que más espacio ocupa en los planes de ciudades. Se busca la solución a un problema en crecimiento, que dada su condición dinámica requiere de estudios amplios que enriquezcan los modelos convencionales. La heterogeneidad de la vida cotidiana le imprime un carácter especial a los estudios que se encargan de modelar los patrones de viaje y con ello definir políticas de planeación urbana y de transporte. Lo que demanda una lectura amplia que genere una completa aproximación a la realidad cambiante producto de la subjetividad de la elección. Las condiciones particulares de cada sujeto lo alejan de ser ese individuo homogéneo que se ha considerado en los modelos tradicionales de elección de modo de transporte. En esta investigación se abordan modelos que con la inclusión de la variable latente seguridad permitan al sujeto tomar un rol activo en la elección de modo de transporte. Dicha variable es entendida y estudiada desde tres elementos que la conforman: el entorno, el sujeto y el modo de transporte. Se desarrolla una investigación mixta en la que, a partir de técnicas cuantitativas y cualitativas, se dimensiona integralmente el problema complejo de la elección del modo de transporte. Así se obtiene un espectro más amplio que permite una mejor identificación de las diversas mixturas que envuelven la elección y que los modelos tradicionales, e incluso los híbridos actuales, no logran captar dado lo limitado de sus planteamientos y metodologías. Constituyendo con ello un aporte en la modelación de transporte. Los datos para los análisis se obtuvieron a través de técnicas cuantitativas (encuestas de preferencias reveladas y preferencias declaradas, al igual que cuestionarios de indicadores de seguridad) y cualitativas (grupo focal y cartografía social). Además de las encuestas que convencionalmente se utilizan en transporte, se efectuó un ejercicio de realidad virtual para vivir un recorrido real recreado a través de videos 360°. A partir de esa experiencia multisensorial, los sujetos eligieron y calificaron, en función de la percepción de seguridad, los diferentes modos de transporte utilizados en ese viaje. Se recrearon diferentes escenarios urbanos de la ciudad de Medellín que fueron sometidos a evaluación por parte de distintos sujetos. Con la finalidad de evaluar el impacto de la percepción de seguridad del sujeto sobre la elección del modo de transporte, se utilizó un instrumento validado de autoeficacia. Previamente, con el objetivo de depurar la variable de confusión de psicopatología de trastornos de ansiedad, se aplicó el instrumento MINI (MINI Entrevista Neuropsiquiátrica Internacional). Ser un sujeto seguro implica ser auto eficaz. La autoeficacia es uno de los elementos constitutivos de la seguridad y bajo esta premisa fue abordada la variable latente en esta investigación. Como resultado se obtuvo que la elección de modo de transporte está fuertemente relacionada con el entorno por el que se realiza el desplazamiento. A partir del análisis estadístico, se obtuvo asociación y significancia entre la elección de modo y el entorno recorrido. Con el análisis de contenido, se reafirmaron las categorías de análisis que fueron definidas a partir de la cartografía social y el grupo focal; encontrando que: lugares activos, iluminados, recorridos en el día, entre otros aspectos, incrementan la percepción de seguridad. Por el contrario, lugares solitarios, con presencia de habitantes de calle, con muros o cercos, recorridos en la noche, disminuyen la percepción. Así mismo, a través de los modelos híbridos se encontró que las variables seguridad del entorno, del sujeto y del modo son significativas. De otro lado, se obtienen los pesos que tienen los modos de transporte sobre la percepción de seguridad en función de los diferentes entornos recorridos. Los sujetos con bajos niveles de autoeficacia puntúan para trastorno de ansiedad, lo que apoya la premisa en esta investigación. En el caso de quienes tienen niveles medios de autoeficacia en un menor porcentaje (7%) resultaron calificados como ansiosos, mientras que el 93% restante hacen parte del grupo de los no ansiosos. Adicionalmente, los sujetos con altos niveles de autoeficacia califican como seguros los diferentes modos de transporte. A modo conclusivo, cuando se efectúa una elección de modo de transporte teniendo en cuenta la percepción de seguridad, los participantes eligen de manera predominante el auto. De acuerdo con esto, y con el fin de avanzar en la implementación de modos sostenibles, será necesario evaluar la seguridad ya que se trata de una variable significativa. Los resultados de este trabajo permiten concluir que para una movilidad sostenible específicamente en el contexto latinoamericano debe incluirse un pilar fundamental como es la seguridad. Los resultados de la investigación muestran el potencial que tiene el bus, dado que las calificaciones asignadas en la mayoría de los entornos evaluados se encuentran en el costado de la seguridad, lo cual lo convierte en un modo potencial para trabajar en pro de ganar usuarios y con ello aportar en la construcción de una movilidad sostenible. (Texto tomado de la fuente)