Esta investigación tiene como objetivo identificar las posturas, tensiones, (des) conocimiento y distancia de las y los operadores judiciales en las investigaciones de feminicidio en Bogotá, a través de la voz de las víctimas indirectas y sobrevivientes de feminicidio. Enfatiza en que las violencias letales contra las mujeres NO son crímenes pasionales, son feminicidios y requieren ser tratados como tal, en el sistema judicial, en los medios de comunicación y reconocidos por la sociedad. Esto lo hago a través de una revisión del desarrollo normativo nacional e internacional para prevenir, sancionar y erradicar estas violencias. La investigación gira alrededor de dos casos de violencia feminicida y uno de sobreviviente de feminicidio; los casos sucedieron en la ciudad de Bogotá entre los años 2012 y 2020. La experiencia de las víctimas y operadores judiciales fue recogida por medio de entrevistas semi estructuradas. El sentido de usar estas narraciones es recuperar la voz de las mujeres, que en el momento de los hechos de violencia inician un trasegar doloroso y frustrante en el sistema judicial colombiano. Señalo la importancia de vencer los estereotipos por medio de la educación y al amor romántico y sus expectativas a través de acciones y decisiones responsables.