En las áreas degradadas manejadas bajo sistemas productivos se alteran dinámicas ecológicas que permiten la sostenibilidad del ecosistema. Cuando la cobertura arbórea se elimina y el suelo se explota intensivamente, el ciclaje de materia orgánica se altera. Uno de los procesos primordiales en el ciclaje, es la descomposición de hojarasca que da inicio al ciclo y aporta nutrientes al suelo, siendo un buen indicador del bienestar de los ecosistemas. La restauración ecológica busca recuperar y restablecer los procesos alterados, con el objetivo de que estos hábitats regresen a su estado natural. Este estudio evaluó cómo responde la descomposición de hojarasca a la restauración ecológica, realizada en áreas anteriormente manejadas bajo distintos sistemas productivos en el paisaje ganadero del río Barbas (Filandia-Quindío), estimando el porcentaje de descomposición de hojarasca. Se empleó el método de bolsas de descomposición en dos coberturas: (1) áreas restauradas que fueron sistemas ganaderos (2) áreas restauradas que fueron plantaciones forestales. Se usaron bolsas de polisombra con 10g de material vegetal seco (5g de cordoncillo y 5g de pasto kikuyo). Se dejaron en campo 1,5 meses. La descomposición fue más variable en áreas restauradas de pastizales (%descomp. 80,947 ± 6,082) y más rápida en áreas restauradas de plantaciones forestales (%descomp. 87,486 ± 3,863). Los resultados preliminares muestran que la historia del uso del suelo sí influencia la descomposición de hojarasca en áreas restauradas y sugieren que el uso del suelo hoy, puede afectar la sustentabilidad en el futuro.