Casi no se discute que para ser un buen musico hay que tener un buen oido musical. Algunos lo consideran condicion previa a toda formacion sistematica, como parte de la dotacion que el musico tiene como condicion de posibilidad. Por el contrario, otros lo consideran objeto de desarrollo o aprendizaje sistematico, y por esa razon lo incluyen como objetivo en los programas de formacion musical y sostienen una pedagogia del oido musical. A pesar de lo extendido que esta el concepto en el sentido comun de musicos y no musicos en nuestra sociedad, es poco, en realidad, lo que se ha investigado de manera sistematica. Muchas preguntas surgen alrededor de este concepto elusivo. Preguntas que buscan tanto definir que entendemos por oido musical y de que naturaleza es el conocimiento que su tenencia implica, como encontrar evidencia de los procesos cognitivos que compromete tal tenencia y las vias de desarrollo que pueden existir tanto en condiciones espontaneas como educacionalmente fomentadas. Este libro se propone avanzar en algunas de las respuestas pendientes. Reune trabajos pioneros por la naturaleza de la indagacion que proponen. En su conjunto abarcan dos areas de investigacion que procuran ir mas alla de los planteos didacticos que abundan en la literatura en torno a este problema. La primera, Escenarios, tiene que ver con la definicion de la naturaleza del oido musical como conocimiento y procura dar respuesta a algunos interrogantes tanto ontologicos y epistemologicos como ideologicos de tal definicion. La segunda, Procesos, se adentra en algunas particularidades de la adquisicion y el desarrollo del oido musical por lo que articula la mirada musicologica con la psicologica del problema. En su conjunto, estos trabajos, avanzan en un area de la investigacion en musica que reclama mayor desarrollo en beneficio de la formacion formal de los musicos.