En una era en la que un alto porcentaje de las comunicaciones son mediadas, urge revisar si los jovenes son mediaticamente competentes y si las instituciones academicas estan haciendo todo lo que esta en su mano para garantizar esta competencia. Revisando los resultados de algunas recientes investigaciones se comprueba que las personas jovenes tienen graves carencias en la mayor parte de las dimensiones que configuran la competencia mediatica. Solo se los puede considerar competentes en la dimension tecnologica. Por su parte, solo un pequeno porcentaje de las facultades de educacion y de comunicacion atienden este campo, de manera que las personas destinadas a trabajar como profesionales de la educacion y de la comunicacion no saldran de las universidades capacitadas para incidir positivamente en la competencia mediatica de la ciudadania. Finalmente, urge analizar algunas carencias relativas al enfoque que se hace de la educacion mediatica, ya que no se afrontan contenidos que son clave para la gestion de las experiencias mediaticas. El mas importante tiene que ver con la funcion del cerebro emocional en los procesos mentales de quien interacciona con las pantallas. Es un factor que conocen y explotan los profesionales de la comunicacion persuasiva y que esta casi totalmente desatendido en el entorno academico.