La buena administracion surge como una herramienta que de cierto modo busca regular de manera adecuada la actuacion del Estado frente al particular, es decir, que sus actos vayan dirigidos de manera adecuada hacia el ciudadano, no obstante, no podemos afirmar que sea esta una herramienta milagrosa que contenga todas las soluciones que por largo tiempo se han buscado, pero si es posible conocer a fondo su esencia y dar espacio a nuevas orbitas no solamente desde lo juridico. Por lo cual, se hace necesario el estudio de esta figura dentro de las instituciones del Estado, bajo la optica de la modernidad liquida, y cuales son los alcances de esta figura en relacion con el ciudadano, que vive bajo uno percepcion de desconfianza en el Gobierno. El analisis de estas figuras debe hacerse en contexto y bajo los parametros que brinda la norma para hacer posible que las estructuras democraticas del Estado esten relacionadas, pero al tiempo con el objetivo de mantener la independencia de estas, para asi fijar un horizonte comun entre las politicas publicas y la legislacion de cada pais.