La agroindustria piscícola es la base alimentaria en muchos países, en los últimos años se ha observado un importante incremento de la producción mundial, el aumento en consumo de pescado conlleva la generación de subproductos como: intestinos, estomago, hígado, sangre, cabezas y escamas, material poco apetecible y no comercial. Los subproductos del pez representan entre un 50 y 70% de su peso. Esta alta generación de subproductos ha creado graves problemas de contaminación ambiental, generando malos olores, contaminación a cuerpos de agua y propagación de enfermedades. Los hidrolizados de proteína se presentan como una alternativa para el uso de estos desechos, estos productos son obtenidos por el rompimiento de la proteína a fracciones de cadenas más cortas y aminoácidos libres, lo que les confiere diferentes propiedades físicoquímicas como capacidad emulsificante y espumante, en algunos casos se obtienen productos con actividad biológica, conocidos como péptidos activos, los cuales tienen algunas funciones fisiológicas en el cuerpo, tales como anticáncer, antioxidante, antimicrobiano, entre otras. En esta investigación se obtuvieron péptidos con capacidad antioxidante (CA) y actividad antimicrobiana (AAM), por medio de un proceso hidrolisis usando la enzima comercial Protamex®, el sustrato fue proteína obtenida a partir de vísceras de trucha arcoíris cultivada en el municipio de Silvia-Cauca. La máxima capacidad antioxidante se obtuvo con un grado de hidrólisis (GH) del 57 %, mientras que valores de GH del 19 % mostraron capacidad antimicrobiana frente a Aeromonas hidrophyla. Los hidrolizados con CA y AAM fueron caracterizados por cromatografía liquida acoplada a masas en un rango de peso de 200 a 12000 Da.