En este articulo se explora un proceso comunmente ignorado o poco descifrado, pero que esta en la base de las practicas y acciones de la Educacion Superior, incluso en la de los intereses de los estudiantes universitarios cuando tejen sus interacciones y proyecciones en el campo social, educativo y disciplinar que le provee la Universidad. Este es el proceso de la configuracion de la subjetividad personal y social, conformado por construcciones simbolicas desde las que se dota de sentido su formacion disciplinar y el espacio universitario.La busqueda de la calidad de la educacion superior es una meta suficientemente justificada, de tal suerte que impulsa toda una dinamica que “parametriza” desde el Ministerio de Educacion Nacional a las diferentes Instituciones de Educacion Superior. Se observa con preocupacion que su instrumentacion en gran medida refiere a direccionamientos y calificaciones de procesos formales e indicadores sobre la gestion administrativa, la planeacion y la evaluacion, donde muchas veces se escapan del analisis los procesos subjetivos de los actores. Asi se corre el riesgo de no evaluar de manera integra los sentidos misionales de la Educacion Superior, o incluso perder de vista el aspecto humano de la formacion superior.