Este proyecto comenzo con el objetivo de analizar el cuerpo de las bailarinas de ballet para identificar en sus deformaciones el sacrificio de su profesion, con el fin de generar una nueva percepcion estetica de la belleza y realizar con ella una propuesta artistica. Pero al repensar los conceptos de deformacion ligados al sacrificio de la bailarina, encuentro que dicho concepto choca con lo que yo estaba nombrando deformaciones corporales y que hoy asumo como transformaciones que adopta el cuerpo de las bailarinas. Encontre, ademas, que alrededor de estas transformaciones fisicas se encuentran —contenidas y ocultas— historias de los procesos a los que ellas se sometieron. El proyecto se habia convertido en una reflexion analitica, lo cual me dificultaba encontrar una propuesta artistica que fuera de mi agrado y que respondiera a mi busqueda. Identifico entonces un combate interno entre las bailarinas estudiadas y el trato que le di a mi cuerpo en un intento por seguir la labor del bailarin en un pasado no tan remoto. Es de ahi que encuentro en el ballet clasico un recurso para volver al pasado, para recurrir a la nostalgia y reconocer aquello no logrado. Reconozco que tambien tengo heridas contenedoras de historias ocultas y encuentro mi cuerpo y mi experiencia estetica con el mundo a traves de las diferentes formas de danza y movimiento corporal como los nuevos centros de estudio. Es con el recorrido intrinseco e intimo con mi cuerpo y su relacion con el contexto del dia a dia donde encuentro la necesidad de representar aquello que tanto me cuesta, algo que consideraba casi prohibido, irrepresentable. Distingo la necesidad de ese proceso de transformacion del que ya me habia percatado en las adaptaciones del cuerpo de las bailarinas de ballet, pero esta vez lo hago acerca de mi cuerpo y de mi experiencia estetica en el mundo.