En la presente investigación se analizó el bajo índice de desarrollo urbano de la zona norte de la ciudad de Quibdó, específicamente del barrio Los Álamos, en el cual se pretende transformar el hábitat de la población mediante una propuesta de intervención urbana que, a través de sus componentes, cubra todas las necesidades físico espaciales de la población y genere un modelo que se pueda replicar en toda la zona norte, como estrategia para mejorar las condiciones de vida de la población y para superar la pobreza, de forma que se pueda permear la segregación socio espacial a la que están sometidos los residentes de esta zona y se restaure la justicia social. Las principales problemáticas del barrio Los Álamos son la violencia, y la pobreza, que se evidencia en déficit cualitativo de vivienda, ausencia de servicios básicos, y la falta de titularidad. Estos factores se entrelazan para producir una estructura urbana segregada y precaria. Para conocer las condiciones de vida de la población, se aplicaron diferentes metodologías de invetigacion: cartografía social del barrio, aplicación de un cuestionario sobre la vivienda, entrevistas a líderes barriales y religiosos y la investigación documental de las políticas de desarrollo urbano en el periodo 2004 -2015. Los principales resultados arrojados por la investigación, indican que el barrio Los Álamos nace por la invasión del lote privado de propiedad de la Diócesis de Quibdó, por parte de personas en condición de desplazamiento, quienes se ubican en una zona de alto riesgo de inundaciones y autoconstruyen sus viviendas con materiales precarios y bajo condiciones humanas inaceptables. Hasta hoy, estas personas no han sido reubicadas por la administración municipal, ni han recibido ayudas para mejorar sus condiciones de vida, basados en los resultados de la investigación se plantea una propuesta de intervención urbana para el barrio los Álamos y se proponen una política de mejoramiento barrial para la zona norte, las cual busca que a través de su implementación se pueda mejorar la calidad de vida de la población, generar el desarrollo urbano de la zona norte, disminuir el déficit de vivienda cualitativo y cuantitativo y los índices de pobreza de esta zona.