Los principales problemas de la movilidad en Bogotá están ligados a la congestión vehicular, la desarticulación de distintos medios de transporte público, el incremento masivo de los vehículos particulares, el aumento poblacional, la ruptura de las propuestas del transporte público durante la historia de Bogotá y la contaminación. Por medio de esta investigación se busca estudiar las distintas problemáticas del transporte de Bogotá, analizar las diferentes alternativas que permitan una articulación y vinculación del transporte no motorizado con el sistema masivo Transmilenio, logrando formular una propuesta de transporte intermodal sostenible. Con la encuesta electrónica se busca conocer las opiniones de los bogotanos sobre el medio de movilización que es usado cotidianamente, entender por qué utilizan ese sistema, qué otros opciones de transporte tienen presente, si cambiarían el medio de movilización y si acogerían un medio de transporte no motorizado, permitiendo reconocer los aspectos relevantes por los cuales los ciudadanos optarían cambiar de medio de transporte. De acuerdo con el análisis de los resultados y la investigación de conceptos como desarrollo urbano sostenible, transportes sostenibles, políticas urbanas y el marco histórico de Bogotá, se evidencia que las principales variables para escoger un medio de transporte son la calidad, el confort, la seguridad, el tiempo y la salud. Al no cumplir con estos aspectos, un porcentaje de los usuarios deben conformarse con el mal servicio del transporte público, principalmente por factores económicos para la adquisición de un transporte privado. En cambio, otra parte de los usuarios prefieren el vehículo particular como medio de transporte cotidiano; por esta razón, existe un aumento del parque automotor de la ciudad tanto de vehículos como de motocicletas (estas principalmente en poblaciones de bajos recursos) produciendo mayor congestión, contaminación, mayor tiempo de desplazamiento en los recorridos, mala calidad en el servicio, estrés e inseguridad. Una de las medidas para mitigar este impacto es la integración de distintos medios, y no depender solo un sistema de transporte. Adicionalmente, por las largas distancias que recorren los usuarios deberían adecuarse zonas de parqueadero para bicicletas en distintos puntos de la ciudad, generando zonas de interconexión con otros medios de transporte público para incentivar el uso de medios no motorizados como alimentadores del transporte masivo. Otra medida es, integrar empresas, universidades y colegios a esta propuesta para que brinden beneficios por utilizar este medio de movilización, logrando con esto la disminución del uso del vehículo particular, convirtiéndose en una herramienta para crear una primera opción de cambio de la percepción del transporte público.