En el auge de herramientas para la valoracion, representacion y reconocimiento de la cultura como hecho transversal en un territorio, se hace fundamental construir estrategias que exalten la legibilidad de su condicion fisica territorial, evidenciando de esta manera la complejidad que conlleva sostenerlo como aquello que vincula, refleja y contiene atributos que dan sentido de identidad. Por tanto, los elementos que le permiten esa posibilidad legible son cada vez mas una identidad homogeneizada bajo lemas globales, que disminuyen como hechos de la cultura, la posibilidad de transmitir emociones, historias, sentidos, recuerdos y experiencias, que permiten reconstruir el lugar territorial sobre una categoria de memoria.