Un mundo predominantemente violento requiere con urgencia estudios de paz que se alejen del proposito esencialista de una paz perfecta, y que mas bien busquen comprender la violencia y la paz como construcciones culturales, historicas, contingentes y mutables, que coexisten y que los mismos actores generan. Este libro recoge avances de los estudios para la paz en Colombia y Mexico surgidos de debates en torno a la paz, los conflictos y el desarrollo en dos paises cuyas sociedades han sido consideradas como desestructuradas debido a las violencias que experimentan. Los autores visualizan el conflicto como un insumo necesario para hacer sociedad y, en consecuencia, evidencian la importancia de todas las practicas de paz que se proponen e implementan, independientemente de su magnitud y alcance. Asi pues, esta obra inicia el camino para la construccion de una agenda de investigacion para la paz en la cual se incorporan los multiples discursos y practicas que desde America Latina permanecen y reflejan el proceso de convivencia entre violencia y paz.