Estamos en la transicion de un cambio de paradigma epistemologico donde muchos cientificos deciden buscar nuevas formas de investigar y crear conocimiento. Las ciencias no estaran apartadas unas de otras y la asistencia que se brindan sera determinante para que esos nuevos descubrimientos no esten aislados dispersos y fragmentados. Cabe agregar que la educacion no escapa a estos cambios y que si bien la pedagogia no ha desarrollado una independencia para considerarse ciencia, se enriquecera con los estudios diversos de los campos de la neurociencia. En este sentido, la aplicacion actual de la neurociencia surge de la necesidad de integrar los diversos descubrimientos de distintos campos cientificos y de las ciencias clinicas dirigidos a lograr el conocimiento y la comprension de anormalidades neurobiologicas que causan desordenes mentales y neurologicos. Su objetivo principal es comprender como el encefalo produce la acentuada individualidad de las acciones humanas, aportando explicaciones de la conducta en terminos de actividades del cerebro, y descifrando como actuan millones de celulas nerviosas individuales en el encefalo para producir la conducta y como, a su vez, estas celulas estan influidas por el medio ambiente, incluyendo la conducta de otros individuos. (Jessel, et al. 1997, tomado de De La Barrera, Donolo, 2009). Los nuevos tiempos y las nuevas necesidades educativas requieren mas que nunca que los profesores nos convirtamos en investigadores en el aula capaces de analizar y evaluar con espiritu critico como inciden las metodologias utilizadas en el aprendizaje de los alumnos, siendo la Neuroeducacion una herramienta para motivar y facilitar los procesos de aprendizaje, sobre en todo en el area de las ciencias duras; evitado asi la desercion escolar.