El humanismo cristiano es un gran reto que exige repensarlo y actualizarlo para que adquiera la pertinencia y el sentido para los actuales contextos de la globalizacion ya que constituye el eje articulador que si logra permear favorecera la potenciacion de las practicas institucionales, los procesos formativos y la identidad institucional mas cercanas y coherentes con el evangelio. En tal sentido, una de las propuestas es la cuaternidad que se propone como alternativa. Dicho concepto reafirma de forma armoniosa la cuadruple relacion que acontece integralmente en el ser humano: consigo mismo se concibe como persona libre, pensante, critica y propositiva, en relacion con el otro actua como hermano haciendo todo lo que agrada y beneficia al otro, con el universo comprende que su mision es la de cocreador en corresponsabilidad y con Dios se reconoce como hijo a imagen y semejanza de su creador.