Al celebrar con el regocijo que es debido el Decreto Pontificio que da vida juridica a nuestra Facultad de Teologia, es apenas justo rendir un homenaje de gratitud a aquellas personas que en diversas formas estuvieron vinculadas al largo proceso cuya feliz culminacion estamos ahora viviendo. Si a sus esfuerzos debemos la realidad que ahora disfrutamos, seria imperdonable dejar pasar en silencio lo que ellos hicieron y lo que su actuacion significo para el buen logro de los propositos iniciales. (…)