Dentro de la monotona repeticion de lugares comunes a que nos tienen acostumbrados los empleados del marxismo de la vulgata, y la insoportable euforia especulativa de la mayor parte de los asi llamados -generalmente por ellos mismos- fi1osofos marxistas, libro de Louis Althusser , constituye una excepcion admirable. En el, con un vigor y una profundidad dignos de la gran tradicion teorica del marxismo mundial, este intelectual y combatiente comunista frances, sencillamente vuelve a pensar. De este modo celebre hilo rojo de Engels en la carta de Starkemburg se enreda , y el desgraciado 'pudding' de Engels a quien Manchester habria abierto los ojos sobre este argumento alimenticio ya no nos parece tan apetitoso: El buen argumento de que la prueba del 'pudding' esta en comerselo. Lo que nos interesa es mecanismo que nos asegure, cuando pensamos comer nuestro pudding matinal, de que lo que estamos comiendo es precisamente un pudding y no una joven elefante al bano maria