Durante los origenes de la computacion, las redes de datos eran consideradas simples, y como tecnologias de bajo impacto, a raiz de que no eran tomadas como un elemento fundamental de las empresas u organizaciones; incluso, era inconcebible la idea de su utilidad para una persona comun. La palabra ‘monitoreo’ era establecida como algo sencillo; ademas, si en algun momento se presentaba alguna falla, su correccion no representaba algo critico. (El Nuevo Diario, 2014). El monitoreo de redes para las empresas es tal vez la actividad que menos se desarrolla, en parte por la escasez de recursos, la ausencia de sistemas de informacion que permitan soportar dicha tarea y por que no, por la falta de una cultura que conciba que los procesos no terminan con las obras y la ejecucion total de los presupuestos asignados a un proyecto, sino que sus resultados son el insumo para retroalimentar futuras politicas que pretenden trabajar en la solucion de problemas similares; es decir, procesos de evaluacion, monitorizacion y control. (Corporacion Colombia Digital, 2010).