(Discurso leido por su autor al discernirle la Universidad Pontificia Bolivariana el grado de doctor Honoris Causa en Filosofia y Letras). He de confesar, para ser sincero, que, si la noticia de que la Pontificia Universidad Bolivariana, con aquiescencia de la Santa Sede, me otorgaria el titulo de Doctor, Honoris Causa, en Filosofia y Letras, no pudo impedir mi profundo agradecimiento por lo inesperada y tuvo que afianzar mi devocion por Roma benevola y por la Bolivariana dadivosa, si amedrento, mas de una vez, mi timidez por hacerme sentir que en las secretas estancias personales no hay suficiente bagaje para retribuir el honor dispensado y por hacerme pensar que habia de pasar por el trance en que ahora me tienen los designios siempre adorables de la divina voluntad. (…)