Colombia se puede caracterizar como una sociedad dominada por “la rutinizacion de la guerra y del olvido”. Las memorias de hechos violentos cuando logran articularse y salir del espacio intimo, no se incorporan necesariamente a la memoria nacional por medio de “politicas de la memoria” en procesos transicionales. Estas memorias son “depositadas” antes que discutidas. La literatura testimonial constituye uno de esos “depositos”. Hay momentos en los que ciertos temas, testigos, autores y tratamientos narrativos adquieren un apogeo inusitado. Estos auges obedecen a factores nacionales como la dinamica del conflicto y la sociedad colombiana, e internacionales como el “giro hacia el pasado”. Al hacer un recorrido por el desarrollo del genero testimonial desde la Violencia de mediados de siglo xx hasta nuestros dias, se logra evidenciar la gravitacion de varias culturas del recuerdo en una sociedad donde aparentemente domina el olvido.