(Al cumplirse 150 anos desde la independencia colombiana, esta Revista y el claustro bolivariano reiteran su fe en la patria, en sus heroes, en su historia, en todos los valores que integran la nacionalidad y la hacen digna y amable. Ser fieles a la patria es en alguna manera conservar la memoria de quienes la plasmaron originalmente. Por ello incluimos aqui este estudio sobre el gran patriota, un tanto olvidado, que al lado de los proceres -Bolivar, Narino, Caldas y tantos otros inmortales­ sembro con fe y desinteres la semilla de la gesta emancipadora). Este sesquicentenario de nuestra independencia politica debiera renovar el conocimiento de nuestros proceres para reiterarles de manera expresa el homenaje que latente, tacitamente les tributa siempre la nacion, pero tambien para que conforten y estimulen la constante tarea civica, en una aproximacion mas decidida a su vida y a su obra, a su martirio y a su gloria. Y con mucha mayor razon cuando al mismo tiempo que volvemos el rostro a mirar agradecidos la epopeya de hace ciento cincuenta anos alcanzamos como pueblo un cruce agonico, un periodo alucinante y abisal. (…)