Nunca puede resultar facil elaborar una reflexion suficientemente coherente alrededor de una muestra que, como la que nos ocupa, reune obras que se han presentado a lo largo de un periodo tan amplio y en medio de circunstancias tan diferentes. Quiza se estaria tentado a plantear de entrada preguntas que en otro contexto pueden resultar mas obvias: En primer lugar, ?puede percibirse un progreso a lo largo de veinte anos? Y luego, ?tiene hoy una calidad superior el XX Salon de Arte Fotografico frente al primero de 1975, por ejemplo?. (…)