Los Tratados Internacionales rigen a partir de su entrada en vigor. Esta regla general del derecho internacional, recoge el principio que consagra la prohibicion de aplicarlos retroactivamente. La irretroactividad de los Tratados configura uno de los criterios que se deben tener en cuenta por los Tribunales Internacionales al momento de declarar su competencia para conocer de un caso y poder establecer la responsabilidad por parte de un Estado, de la violacion de dicho instrumento. En el derecho internacional de los derechos humanos, este principio se traduce en la ratione temporis, el cual constituye un criterio de competencia para el conocimiento de los casos por parte de los tribunales competentes en la materia. Sin embargo, este criterio no reviste un caracter absoluto; en efecto, la desaparicion forzada de personas se inserta como una excepcion a la regla general, que habilita el sometimiento del caso a la esfera supranacional por contener unos elementos especiales que son: su caracter continuado y su naturaleza pluriofensiva. Abstract The international treaties govern when they come into force. This general rule of International Law covers the principle that enshrines the prohibition of applying them retroactively. The non-retroactivity of treaties constitutes one of the criterions that must be taken into account by the International Court when declaring a state’s jurisdiction to know about a case and determine the responsibility on the violation of that instrument. In the International Law of Human Rights this principle results in the Ratione Temporis, which constitutes a competence criterion for knowledge of cases by the competent courts. Nevertheless, this criterion is not absolute in nature; in fact, forced disappearance of people is attached like an exception to the general rule that enables the submission of the case to the supranational sphere for containing some special elements that are: its continuous character and multiple-offense nature.