En uno de sus Articulos de costumbres, publicados en 1883, se burla Ricardo Silva del obseso lenguaje del comercio que, al parecer, ha invadido por esa epoca lo que el costumbrista llama el estilo del siglo. La realidad social que se refleja en ese articulo contrasta aparentemente con descripcion que de atmosfera de sociedad bogotana de esa epoca hace el escritor argentino Miguel Cane en figura de una dama de apellido Caicedo Rojas, de quien dice que intuicion maravillosa de los grandes maestros. .. i Con que solemne majestad traducia a Beethoven! i Que ligereza elegante y delicada adquiria su mano para bordar sobre un teclado uno de esos tejidos aereos de Mozart! Solloza a Schubert, canta y suena con Mendelssohn, brilla y gime con Chopin, vibra y arrebata con Rubinstein ... Sentada al piano, moviendo el arco de su violin, haciendo gemir un oboe o las cuerdas del arpa o el tiple, cantando bambucos con su voz delicada y justa, componiendo trozos como 'El alba', que es una perla, siempre esta en region superior del arte. En cambio, con menos entusiasmo un comandante frances observaba, por misma epoca, que la fatuidad de los bogotanos sobrepasa a cuanto es posible imaginar. No habiendo salido jamas de su tierra, se figuran de buena fe que su capital es ciudad mas hermosa del mundo y llaman nueva Atenas. .. En vida ordinaria, los hombres dicen estupideces, juegan, hacen revoluciones y manejan tenduchos. Las mujeres no hacen sino dormir y comer dlces. .. no salen jamas de sus casas sino para ir a iglesia. Esta vida sedentaria las embrutece y engorda de tal modo que parecen verdaderos fardos. Los bogotanos afirman que son muy fieles; en tales condiciones esto nada tiene de extrano.