La obra del historiador Reinhart Koselleck comienza con una lectura de la modernidad signada por la tension entre la logica del Estado y la historizacion de los conceptos morales en la ilustracion. Durante los anos setenta su trabajo se orienta hacia la reflexion metodologica en torno a la historia conceptual y a la aplicacion de su propia teoria. El texto intenta mostrar la continuidad entre esos dos periodos de su trabajo, senalando como el sentido politico de la Begriffgeschichte no es otro que hacer concientes a los actores politicos modernos de la estructura temporal de conceptos semejantes a aquellos que guian su accion y, por esta via, evitar la recaida en una absolutizacion de sus pretensiones morales. De esta forma el saber historico recuperaria el valor para vida activa que le era inherente desde la antiguedad pero que, con la entrada de la fase utopista de la modernidad, habia sido eliminado de su horizonte de posibilidades.