Analizar la pertenencia de los jovenes universitarios a las redes sociales de Internet, es un asunto que advierte tres conceptos fundamentalmente: la existencia de la sociedad red incorporada a la realidad junto con otras presencias como las expresadas en la naturaleza y en la vida de ciudad; la cercania del ciberespacio, en el mismo contorno de la plaza publica, la institucion educativa, la familia o el trabajo; y las potencialidades de Internet como generador de satisfactores para algunas necesidades humanas. Estas realidades justifican la atraccion de las redes sociales. Aspectos como la presencia transcultural o la omnipresencia hacen que las redes sociales se comprometan como nodos productores y consumidores de informacion. A esto se suma que en estas redes las personas facilmente pueden expresarse, ser escuchadas, compartir identidades, deleitarse con afinidades comunes. Por supuesto, no puede darse por sentado que sean ambientes perniciosos o que por si mismas tales comunidades sean triviales. De hecho parte de la convivencia en la red virtual es una extension de las relaciones sociales cotidianas. Tampoco puede deducirse que por su acceso libre y facil, las redes sociales se relacionen directamente con los peligros para la integridad de las personas y que estar alli sea ya el camino para abusar y ser abusado. Anterior a la estadia en redes, esta la educacion recibida de la familia, la escuela, el barrio. Ir en Internet hacia un camino u otro son opciones surgidas en los propios valores de las personas. La eclosion de las redes sociales como punto de encuentro entre las personas determina temores y juicios, a veces apresurados. Es asi como llega a advertirse que para los estudiantes universitarios, no son una buena opcion, cuando en realidad para este publico la red es tambien atractiva. Estos no van a las redes para sus indagaciones academicas, pero sin que se vengan a menos estas, si van para fines personales y en busqueda de satisfactores a algunas de sus necesidades.