La busqueda de calidad en la educacion requiere claridad en los procesos formativos, reconocimiento de estimulos y una inversion apropiada. Los docentes necesitan formacion y motivacion continua para la buena ensenanza, al igual que optimas condiciones laborales. La evaluacion es adecuada si se realiza con propositos formativos; no se considera aceptable utilizarla para desprestigiar la profesionalidad de los maestros y para congelar los escalafones salariales e impedir el mejoramiento de sus ingresos. Separar la evaluacion del desempeno y la evaluacion de competencias ha sido una forma de obligar a los docentes a que financien su propia formacion, dejando a un lado la responsabilidad del Estado para invertir en el desarrollo profesional. Dos estatutos y dos escalafones salariales rigen la carrera docente, lo cual ha traido un sinnumero de tensiones entre el autoritarismo gubernamental y el espiritu gremialista. Este articulo es un avance de investigacion sobre la evaluacion del desempeno docente y su relacion con la calidad de la educacion y persigue sensibilizar sobre lo que sucede luego de una decada de vigencia de la evaluacion.