La células de nuestro cuerpo son fuente de especies reactivas, las cuales, ayudado por una disfunción de las defensas antioxidantes, pueden atacar moléculas fundamentales, desencadenando desordenes graves como la neurodegeneración. En esta revisión se describen las especies reactivas como el anión radical superóxido, el anión hidroxilo, el peróxido de hidrógeno, el ácido hipocloroso, el óxido nítrico y el peroxinitrito, con fuentes como, la cadena de transporte de electrones y las enzimas monoamino oxidasa y NADPH oxidasa. También se detallan los mecanismos de defensa antioxidante endógenos y como una falla de los mismos origina agregación de proteínas, oxidación de bases nitrogenadas en la molécula de ácido desoxirribonucleico (ADN) y peroxidación lipídica.