Este articulo muestra que Colombia parece tener niveles de salario minimo e informalidad laboral mayores que los esperados de acuerdo con su ingreso per capita, aunque no se encuentra entre los paises de “maxi salarios minimos”. La evidencia empirica descriptiva mostrada no parece apoyar el enfoque tradicional sobre la relacion entre salario minimo e informalidad. Esto significa que gobiernos, analistas y organizaciones multilaterales deberian ser prudentes cuando recomiendan para los paises en desarrollo reducciones en el salario minimo con el fin de mejorar el ingreso de los trabajadores informales. De gran importancia resulta modificar la politica de salario minimo contra-ciclica implementada en el periodo analizado, a juzgar por el comportamiento de sus niveles relativos. Finalmente, la politica de salario minimo en Colombia parece estar cambiando su objetivo, debido a la estrategia empresarial de eliminar la negociacion colectiva descentralizada.