Percibir a la Universidad como organismo vivo e inteligente, conlleva necesariamente a un vuelco del modelo de gestion universitaria, que se puede llamar tradicional, en el cual se ordena, coordina y controla el desempeno de las personas. Una nueva orientacion de la gestion universitaria debe estar dirigida hacia un modelo de gerencia estrategica, capaz de identificar los obstaculos para convertirlos en oportunidades, generar confianza y sentido de responsabilidad. Debe ser un modelo que respete la creatividad, la innovacion y reivindique el derecho a escuchar y a ser escuchados en un marco reflexivo de compromiso entre sus colaboradores