Buscar formas de identificacion ha interesado al hombre siempre, desde cuando este experimento alguna confusion mental debido a la ambiguedad de los estimulos de su entorno fisico o social. Entonces comenzo a nominar las cosas mas cotidianas y familiares y entre estas a sus congeneres. Pero las identificaciones no se limitaron a las vocalizaciones, sino que el humano tambien apelo a eventos y a objetos que lo representaran, pues tales cosas ofrecian cualidades de interes para aquel. Entonces el sol, la luna, la tierra, el mar-oceano, la lluvia, el true no, el rayo; el leon, el aguila, el condor, el color, la luz, la blancura, la fuerza, la fertilidad, lo majestuoso, lo terrorifico, la belleza, el amor... Pasaron a representar, a identificar simbolicamente las realidades y los anhelos de los mortales y de los dioses.