Para introducir al padre como parte importante de la familia es preciso iniciar un cambio cultural en el cual se hable del padre como tal se discuta sobre el, se le implique en los sitios y situaciones donde debe pertenecer y ante todo se le devuelvan los derechos perdidos. Y a los ninos se les permita hablar con orgullo de sus padres, la importancia de su juego, su contacto, sus caricias, y el orgullo que los embarga cuando sus padres los hacen participes como si fueran ese otro para el.