Esta ponencia defiende una posicion instrumentalista con respecto a los estados mentales a partir del tratamiento del problema de la representacion. El argumento consiste en dos grandes pasos: el primero es mostrar que, para la explicacion de la representacion erronea, se debe apelar a una teoria teleologica de la representacion; y el segundo consiste en mostrar como toda teoria teleologica es incompatible con el realismo intencional. A partir de esto se trataran dos de los cuestionamientos principales del instrumentalismo: la dificultad que se encuentra al intentar explicar en un marco antirrealista la efectividad de la psicologia popular, y la inconsistencia en la que aparentemente cae una postura instrumentalista que se apoye en consideraciones teleologicas.